Escritor francés (1824 – 1895). Contenido: Frases de su libro «La Dama de las Camelias».
FRASES DE «LA DAMA DE LAS CAMELIAS»
1) De cuando en cuando es preciso revelar los martirios de esos seres que se condena sin oír y se desprecia sin juzgar.
2) Estoy sencillamente convencido de un principio y es este: para la mujer que por su educación no ha aprendido el bien, Dios abre casi siempre dos senderos que le hacen volver a él; esos senderos son el amor y el dolor.
3) Puesto que en el cielo hay más alegría por un pecador arrepentido que por cien justos que no han pecado nunca, intentemos alegrar al cielo.
4) Los hombres en vez de estar satisfechos de que se les conceda durante mucho tiempo, lo que apenas hubieran esperado obtener una vez, piden cuentas a su amante del pasado, del presente y del futuro.
5) Si ahora me decido a tomar un nuevo amante quiero que tenga tres cualidades poco frecuentes: que sea confiado, sumiso y discreto.
6) Hay incidentes de un minuto que producen más efecto que un cortejo de un año.
7) Apoderarse de un corazón que no esté acostumbrado a los ataques es entrar en una ciudad abierta y sin guarnición.
8) Si los hombres supieran lo que se puede conseguir con una lágrima, los querrían más y los arruinarían menos.
9) Cuando Dios permite el amor a una cortesana, ese amor se parece en principio a un perdón, que casi siempre acaba convirtiéndose para ella en un castigo. No hay absolución sin penitencia.
10) Cuando una criatura que tiene un pasado que reprocharse se siente de pronto presa de un amor profundo, sincero, irresistible, del que nunca se creyó capaz, cuando ha confesado ese amor ¡cómo la domina el hombre al que así ama¡.
11) Toda criatura que no sea la mujer amada parece un ser inútil en la creación.
12) El amor verdadero siempre nos hace mejores; cualquiera que sea la mujer que lo inspire.
13) No soy un apóstol del vicio, pero me haré eco de la desgracia noble donde quiera que la oiga implorar.